De Katy Perry en corpiño A Taylor Swift escotadísima: los looks más impactantes de los VMAs 2024

La ceremonia de los MTV Video Music Awards es una de las más esperadas en la industria de la música y su edición 2024 combinó lo mejor de la moda con la presencia de los artistas más importantes de la escena actual. Taylor Swift, la gran ganadora y también de las más fashionistas, fue la estrella de la noche junto a otras como Katy Perry, Sabrina Carpenter, Karol G y Anitta.

Los dos vestidos de Taylor Swift

La intérprete de Fortnight no solo se llevó 7 estatuillas sino que arrasó con sus apuestas de moda. En su llegada, deslumbró en la alfombra negra con un vestido de Dior con corset de estampado cuadrillé en amarillo con falda abierta a juego, que a su vez dejaba a la vista una mucho más pequeña y corta de color negro.

Remató el jugado diseño con un par de bucaneras de cuero negras y guantes largos del mismo género con tiras cruzadas y aberturas.

En medio de la ceremonia, la artista se cambió el vestido de Dior por uno de Monse, una marca de lujo fundada en Nueva York. Se trata de un diseño sin mangas ajustado al cuerpo con falda corta irregular, estampado con ilustraciones de ovnis y adornado con pedrería brillante que destelló en el lugar y acaparó los flashes.

Katy Perry con lencería a la vista

Katy Perry fue otra de las más impactantes de la noche y presumió su figura con un conjunto blanco de dos piezas firmado por Who Decides War. El equipo, de efecto deshilachado, se compone de un corpiño underboob con escote irregular y una falda larga de tiro bajo. ¿El detalle? Un brazalete plateado metálico en un brazo que aportó un toque futurista.

La artista posó junto a su marido, Orlando Bloom, que la acompañó con un elegante y clásico conjunto de sastrería negro con zapatos de cuero al tono y una remera a juego.

Camila Cabello en modo gótico

Firmado por Tony Ward, Camila Cabello llevó un vestido de estilo gótico con base nude y bordados en negro, un velo de tul también negro y collares con dijes de cruces como broche de oro.

Sabrina Carpenter con un diseño de archivo

La mujer detrás del exitoso single Espresso tampoco faltó a la premiación y desplegó elegancia con un vestido vintage de los 90 de Bob Mackie de silueta ajustado al cuerpo, escote strapless y bordados de paillettes y pedrería al mejor estilo Old Hollywood.

Karol G a puro color

La colombiana llevó su alegría y color a la alfombra negra con un vestido amarillo y naranja de la colección primavera/verano 1996 de Véronique Leroy. El modelo, ajustado al cuerpo, tiene un pronunciado escote con cierre y detalles blancos que se extienden hasta las hombreras.

Anitta, una novia rebelde

La cantautora y bailarina brasileña sorprendió a los presentes con un look total white que reflejó su personalidad audaz. El diseño, de Dolce & Gabbana, consta de un corset con lazos entrecruzados, una falda larga que deja los laterales de las piernas al descubierto y una capucha a juego estilo velo. ¿Los detales finales? Medias portaligas hasta los muslos y joyería plateada brillante.

Paris Hilton con brillos y roturas

La famosísima empresaria apostó a la elegancia de un vestido plateado brillante combinado con la audacia de las roturas que se extendían por todo el talle. El diseño es de la griega Celia Kritharioti y lo combinó con una imponente gargantilla con pedrería y eslabones metálicos.

Suki Waterhouse de negro y con piel

La modelo, cantante y actriz británica (que hace pocos meses fue mamá junto a Robert Pattinson) reafirmó su status de it girl con un diseño negro de Dolce & Gabbana que combinó varias tendencias de la temporada, desde un corpiño unido a una falda drapeada con pliegues hasta el abrigo de piel que llevó para complementarlos.

Lil Nas X en modo racer

Siempre disruptivo (su transformación en plena red carpet de la Met Gala 2021 todavía es de las más recordadas), el artista volvió a sorprender, esta vez con un conjunto de chaqueta cropped y pantalón, todo de cuero en blanco y fucsia al mejor estilo racer, inspirado en el vestuario de los automovilistas. El broche de oro fue un caso al tono que le cubrió casi toda la cara.