Horas de tensión se vivieron este miércoles por la mañana en Recoleta después de que dos diplomáticos rusos provocaran un escándalo al negarse a realizar un control de alcoholemia. Los protagonistas de este curioso episodio fueron identificados como Sergei Baldin y Cardmath Salomatin.
En uno de los momentos de mayor incertidumbre, apareció un ciudadano ruso vestido con una camiseta de Nueva Chicago que intentó interceder para calmar los ánimos y lograr una pronta resolución.
Aunque dijo no conocer al conductor, igualmente le golpeó la ventana e intercambió unas palabras con él en su idioma natal. Las imágenes pronto se viralizaron en las redes sociales.
Horas más tarde, desde el club Nueva Chicago de tomaron esta situación con humor y publicaron un curioso mensaje. “¡Qué aburrido ser hincha de un club normal! Yo soy de Chicago y me gusta el vodka”, escribieron, junto a una bandera rusa.
Finalmente, los hombres atrincherados en dos autos distintos tuvieron que ser escoltados por la Policía de la Ciudad hasta la Embajada de Rusia. Desde la sede diplomática calificaron al intento de hacerles el control de alcoholemia como una “una grave violación de derecho internacional”.
